El bruxismo es una de las problemáticas menos conocidas entre la población adulta, sin embargo, es de las más frecuentes.
El bruxismo es el término científico para cuando el rechinar los dientes moviendo las mandíbulas de delante hacia atrás y viceversa normalmente de manera inconsciente ya sea durante el día o la noche.
Hay diversas causas que pueden provocar este problema, por lo general suele ser causado por un alto nivel de estrés que se acaba externalizándose mediante el rechinamiento de los dientes causando dolores en la mandíbula, de oído además de posibles dolores de cabeza, ansiedad o sensibilidad dental al frío, el calor y los alimentos dulces.
Con el paso del tiempo los dientes sufrirán problemas de alineación y un desgaste progresivo de la dentadura, predisposición a sufrir caries y traumatismos de las encías.
Aunque de momento no existe una solución definitiva para erradicar el bruxismo en su totalidad, existen métodos para evitar los dolores de cabeza como, por ejemplo, las férulas de descarga que protegen los dientes y en casos más avanzados se recomienda antiinflamatorios y relajantes musculares.
Para detectar el bruxismo es importante acudir al dentista con frecuencia ya que en algunos casos es difícil de detectar ya que como hemos comentado anteriormente a veces se produce de manera inconsciente. El dentista, podrá detectar con más facilidad si empezamos a padecer este problema observando los dientes.