Llegan las fiestas de Navidad y, con ellas, una de las época de l año en que ingerimos alimentos con más abundancia (o, para ser más exactos, en el que ingerimos alimentos copiosos con más abundancia). Si tenemos en cuenta que la mayoría de caries y de problemas bucodentales surgen a raíz de la combinación entre un consumo excesivo de azúcar y una mala higiene oral, la conclusión no falla: muchas de las afectaciones bucales se producen durante las fechas navideñas.
Si no queremos que estos días de celebración –pero también de excesos y de cambios de rutina– tengan consecuencias negativas para nuestra salud, debemos tener un cuidado especial para mantener sanas nuestros dientes. Aquí una recopilación de trucos sencillos para regalarte salud y belleza durante esta Navidad:
1) El turrón duro –el de Alicante– es el más amable para la dentadura, ya que su composición es mayoritariamente de almendra, miel, clara de huevo y un bajo porcentaje de azúcar. Si optas por el de chocolate, procura que sea negra. Tiene propiedades antioxidantes y cardioprotectoras.
2) Las golosinas pegajosas y los dulces blandos crean problemas de inflamación de encías. Especialmente, entre los niños que llevan aparatos de ortodoncia. Por su parte, los dulces más duros pueden fracturar los dientes, así como destrozar los empastes y dañar los trabajos de ortodoncia. No se trata de no comer, sino de vigilar cuando masticamos.
3) Como en cualquier otra época del año, hay que tener control con las bebidas alcohólicas. Su abuso nunca es recomendable y, aparte, son perjudiciales para nuestros dientes.
4) El otro gran peligro hidráulico son las bebidas azucaradas, que pueden llegar a dañar gravemente el esmalte. En lugar de tirar de edulcorantes artificiales, mejor reducir el consumo directamente. Los productos light suelen contener fructosa, glucosa y otros azúcares dañinos para los dientes.
5) El aceite de oliva es nuestro gran aliado. Aparte de tener numerosas propiedades muy beneficiosas para el conjunto del organismo, también favorece nuestra dentadura gracias a la película invisible que deja sobre él y que la protege de la caries y del desgaste cotidiano.
6) Las comidas de celebración que hacemos fuera de casa alteran la recomentadble rutina de cepillarse la boca tres veces al día. Llevar un pequeño cepillo siempre encima es un hábito sencillo y discreto que, a la larga, puede evitar muchos problemas posteriores.
Tanto si lo desean o pueden seguir estos consejos o no, que acaben de pasar unas felices fiestas acompañados de la gente que más quieran. En Balust Odontòlegs, como siempre, os esperamos durante este 2019 con la mejor de las sonrisas.
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